Me encantan los salteados. Desde que empiezas hasta que terminas no te puedes separar de la cocina, porque cualquier abandono podría quemar lo que estás salteando o dejar alguna parte sin hacer. El salteado lleva su pequeño sofrito de ajos o cebollas con otros ingredientes, más el meneo a la verdura, carne, pescado o pasta que irá de protagonista. Un salteado es cocinar cuerpo a cuerpo. Aquí va uno que encontré en la página gastronomía y cía y que está riquísimo. www.directoalpaladar.com
Ingredientes para cuatro personas: 400 g de judías verdes redondas (o cuadradas, porque no siempre se encuentran), 400 g de champiñones, 4 dientes de ajo, la ralladura y el zumo de un limón, algo de tomillo, aceite de oliva, sal y pimienta.
Limpiamos las judías y les cortamos los extremos (si son de las aplastadas, las cortamos por la mitad longitudinalmente), las cocemos al vapor o en agua hirviendo con un poco de sal hasta que estén tiernas pero aún crujientes. Reservamos. Limpiamos bien los champiñones y los cortamos en láminas.
Calentamos dos cucharadas de aceite de oliva en una sartén y salteamos los champiñones con los ajos cortados en rebanadas a fuego medio durante unos diez minutos, luego añadimos el tomillo, la ralladura y el zumo de limón y dejamos cocer otros tres minutos. Añadimos entonces las judías verdes cocidas, mezclamos bien, sazonamos y servimos caliente. También admite un poco de pimienta, pero bueno, las especias son algo muy subjetivo.
Están muy ricas.