Un plato muy completo, pues lleva verdura y carne. Está muy rico y gusta mucho a los niños, y además puede prepararse el día antes.  
 
Ingredientes para 2-3 personas: 1 coliflor pequeña (600 g en limpio), 400 g de carne picada (ternera o cerdo, que sea jugosa), 300 g. de tomate frito casero, queso del que tengamos para rallar, 2-3 ajetes tiernos, medio vasito de vino blanco, salsa bechamel (hecha con 30 g de harina, 300 dl de leche, media cucharadita de nuez moscada y 3 cucharadas de aceite de oliva virgen), opcionalmente algo de mantequilla para untar el fondo de la fuente de horno, y aceite de oliva virgen extra. 
Primero limpiar y trocear la coliflor y cocerla al vapor. Reservar. 
En un perol con aceite, pochar los ajetes limpios y troceados durante unos minutos. Añadir la carne picada, saltear y añadir el vino. Dejar que se sofría 8-10 minutos con un poco de sal.  
Preparar la bechamel. (mejor en el robot de cocina): poner todos los ingredientes en el robot, programar 10 minutos a velocidad 5. A continuación, programar 7 minutos 100º C y velocidad 3. Reservar. 
En un molde de horno, untar el fondo con mantequilla, e ir extendiendo las diferentes capas, una sobre otra:
 
1ª capa de coliflor picada
2ª capa de tomate frito
3ª capa de queso rallado
4ª capa de carne picada sofrita
5ª capa de bechamel
6ª capa de tomate frito
7ª capa de queso rallado
 
A continuación, introducir el molde en el horno media hora a 180ºC, y poniéndolo otros diez minutos para gratinar. Servir.