Ayer jueves, asistí junto con otros miembros de la Academia Sevillana de Gastronomía y Turismo, a un almuerzo en el Restaurante Abantal, único Estrella Michelín en Sevilla, y regentado por el chef Julio Fernández, que ostenta esta distinción durante doce años ininterrumpidos.
Julio Fernández es un cocinero cercano, amable, trabajador, que más de una vez nos ha relatado su propia evolución culinaria. Sabemos que partió de una cocina sencilla, tradicional, y que poco a poco fue creando su propia cocina de autor, de mayor complejidad y creatividad, en un formato de alto nivel, ligando sabores y técnicas depuradas, demostrando así un sólido talento.
Con menús de degustación variados alrededor de sabores clásicos y definidos, sorprende al comensal con elaboraciones y emplatados. Al mismo tiempo, apuesta por los vinos andaluces y varios de ellos de la provincia de Sevilla.
Abantal –haciendo honor a su categoría de élite, ofrece un excelente servicio del equipo de sala. Amabilidad y elegancia en la división de honor aquí en Sevilla.