Un plato muy energético y sabroso. Lleva, eso sí, un buen sofrito. Es importante la calidad del bacalao y de la patata. Y es que me sobró algo menos de cuarto kilo de bacalao, después de hacer las croquetas acostumbradas.
Ingredientes para 4 personas:
250 g de bacalao en filetes, 1 cebolla grande, 1 diento de ajo, ½ pimiento rojo, 1 pimiento verde de freir, 3-4 ramitas de apio, 1 hoja de laurel, 1 poco de salicornia (espárrago de mar, opcional), ½ vaso de tomate frito casero, 2 patatas grandes, 1 cucharada pequeña de ñoras, algo de pimentón dulce, 1 vaso de caldo de pescado casero, medio vasito de vino amontillado, perejil fresco, sal y aceite de oliva virgen extra.
Desalamos el bacalao durante dia y medio más o menos, cambiando el agua cada 8 horas. Escurrimos el bacalao y reservamos, tras cortarlo a trozos tamaño bocado.
Picamos el ajo, la cebolla, el apio y los pimientos.
En cacerola con aceite fondeamos el ajo, la cebolla, el apio, el laurel y los pimientos durante 2 minutos aproximadamente a fuego medio alto.
A continuación añadimos la salsa de tomate y las ñoras y dejamos todo otros 5 minutos.
Ponemos las patatas troceadas, el pimentón, la sal y el caldo, para cocer todo 25-30 minutos, junto con el vaso de vino.
Por último, ponemos el bacalao y el perejil picado durante 5-10 minutos.
Y listo. Lo sobrante -si lo hubiera- estará riquísimo al día siguiente.