El próximo jueves 11 de agosto tenemos una cita para defender el patrimonio de la ciudad de Cádiz. Desde la Plaza Fray Félix (Plaza Parroquia de Santa Cruz) saldremos a las 8 de la tarde para recorrer en manifestación diversos lugares del callejero relacionados con la historia gaditana y en evidente abandono. El acto está organizado por ADIP (Asociación para la Defensa y la Investigación del Patrimonio Cultural de Cádiz) y por la Asociación de Historiadores e Investigadores del Subsuelo de Cádiz. La convocatoria se hace por segundo año consecutivo. Necesitamos una amplia participación.
Muchos lugares significativos abandonados a su suerte, sin merecer la atención necesaria en rehabilitación, reconstrucción, mantenimiento y puesta en valor. Lugares de diferentes épocas que cuentan la historia de la ciudad de Cádiz en sus más de 3.000 años de historia.
En la marcha, nos detendremos en puntos tan importantes como el yacimiento de la Casa del Obispo, el espacio Entrecatedrales, el Teatro Romano, el barrio del Pópulo, la Casa del Almirante, el Seminario Diocesano San Bartolomé, el Hospital de Mujeres, el campanario de la Parroquia de San Lorenzo y la iglesia de la Divina Pastora, el entorno de la playa de La Caleta, los castillos de San Sebastián y Santa Catalina, el edificio de Valcárcel y la Escuela de Náutica; sin olvidar el Monasterio de Santa María, tal vez el que más me duela a título personal.
El Monasterio de Santa María es de lo poco que nos queda perteneciente al siglo XVI. Un convento que albergó la historia más viva de la ciudad, que vivió intensamente el pulso de la sociedad: florecimiento económico, movimientos ideológicos, influencias sociales, pero también guerras, revoluciones, escaseces, crisis políticas, etc.
Santa María –convento de clausura pero inmerso en una bulliciosa ciudad- vivía al compás de Cádiz. Por ella pasaron mujeres pertenecientes a las familias más influyentes de la ciudad, de España y de otros países de Europa, relacionadas con el comercio o la política. Es un documento fidedigno de lo que ha sido Cádiz desde su fundación en 1.527 hasta nuestros días, hoy en peligro de desaparecer por la desidia y el olvido.
Las monjas de Santa María tuvieron que abandonar el edificio dado su grave estado de deterioro, trasladándose al cercano Monasterio de la Piedad, y allí continúan desde hace diez años.
El Monasterio se nos cae si no ponemos remedio y caerá con él una parte de la historia de Cádiz.
La Asociación de Amigos de Santa María –creada hace unos años para buscar financiación con que consolidar y rehabilitar el Monasterio- viene organizando unas visitas guiadas al edificio a un precio simbólico, con el fin de mostrar, concienciar e informar del estado ruinoso del lugar, así como de la riqueza e historia que guardan sus paredes y su claustro.
Y estoy obligada a citar la tesis de la doctora de origen francés Frederique Morand, defendida en la pasada primavera en la Universidad de Alcalá de Henares, que trató precisamente sobre la historia del Monasterio de Santa María, y por ende, de la historia de Cádiz, con datos inéditos que vienen a reescribir nuestro pasado. De ahí la importancia como fuente de datos que albergan los muros de Santa María.
Solo quiero recordar a todos que las visitas al Monasterio de Santa María se siguen organizando, previa cita al teléfono 622 159 078.
Os dejo la crónica de nuestro recorrido por el edificio.
Espero verte el próximo jueves a las 20 horas en la Plaza Fray Felix de Cádiz, para manifestarte en defensa del patrimonio abandonado de la ciudad.