El pasado 31 de mayo tuvo lugar en Cádiz, en la sede de la Fundación Municipal de la Mujer una interesante conferencia a cargo del Dr. Juan José Silva Rodríguez, médico especialista en endocrinología y nutrición, bajo el título “Alimentación saludable: intolerancias”. El Dr. Silva desarrolla su labor en la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Universitario de Puerto Real. El acto se enmarca en el ciclo formativo que la Fundación Municipal de la Mujer viene realizando en aspectos sanitarios.

El conferenciante mostró la nueva rueda de la alimentación, más fácil de entender que la pirámide clásica. Pero en alimentación no hay dos personas iguales debido a las intolerancias a algunos alimentos, todo un reto para el diagnóstico médico. Distinguió entre alergia alimenticia e intolerancia alimenticia. En el primer caso, alergia, el sistema inmune rechaza un determinado alimento (por alguna proteína que no soporta), con síntomas como urticaria, hinchazón de labios, lengua, diarreas, vómitos, incluso asfixia. En cuanto a la intolerancia, el que interviene es el propio aparato digestivo, que no está preparado para digerir ese alimento. Los síntomas son más leves. Por ejemplo, la celiaquía en el primer caso y la intolerancia a la lactosa en el segundo. Es preciso analizar los distintos grupos de alimentos, en las dos etapas de la vida (niños y adultos). Las intolerancias suponen no metabolizar algunos alimentos, produciendo malestar constante en algunas personas.

Los cereales: distinguir alergia al pan por celiaquía o por dolor y distensión abdominal y diarrea. Los niños son los más fáciles de diagnosticar y mejorar; no así en los mayores. Es preciso un análisis de sangre y la biopsia del intestino. Siempre el pan integral es mejor, por la intolerancia producida por el almidón (glucosa al metabolizar).

Aunque somos carnívoros, nuestro aparato digestivo era herbívoro. Tras la leche materna, el niño empieza a alimentarse con cereales y luego con frutas, carne y pescado. Los cereales tienen fibra, vitaminas A, C y E y antioxidantes y son un potente protector frente a los infartos.

Las frutas: Son fuente de alergias, sobre todo las rosáceas, como fresas, moras o arándanos, incluso el melón y los plátanos, y algunas frutas que son nuevas en la dieta española, como el kiwi.

Las verduras: no todas las verduras eran comestibles, y de ahí el origen de su rechazo, pero son buenas contra inflamación y carcinomas. En las verduras hay intolerancias pero casi nunca alergias, estamos muy adaptados. El aumento de los casos de cáncer de colon es por el déficit de fruta y verdura.

Los frutos secos, tan aconsejables, producen alergias con mucha frecuencia, sobre todo los cacahuetes. Las nueces protegen del riesgo vascular por sus ácidos grasos insaturados, bajando el colesterol malo. Las grasas vegetales hacen que el HDL (colesterol bueno) crezca y baje el LDL (colesterol malo).

Grasas: En cuanto a las grasas vegetales, distinguir entre margarina y mantequilla: ambas son malas, aunque mucho peor la primera.  Lo mejor es el aceite de oliva virgen extra, grasa monoinsaturada con vitaminas y antioxidantes. El aceite de coco y de palma son muy perjudiciales para la salud.

Las legumbres, muy sanas, buenas contra el estreñimiento por su fibra; con cítricos, ayudan a absorber el hierro. Antes el agua llevaba hierro. Causan alergias pero no intolerancia, aunque a veces sean poco digestivas.

Lácteos: producen alergias e intolerancias, sobre todo la leche de vaca en niños, por intolerancia a la lactosa, cuando el intestino no produce la lactasa. No es para siempre, a menos que exista algún problema intestinal, o el llamado intestino envejecido, en personas muy mayores. El yogur no tiene lactosa y se metaboliza muy bien.  Las mujeres por menos estrógenos tienden a la descalcificación y necesitan más lácteos contra osteoporosis, artrosis y dolores articulares. Su hueso es proporcional al calcio de toda su vida.  Nos falta vitamina D por falta de sol (vivimos en interiores); 20 minutos diarios en brazos y piernas sería suficiente.

Carnes y derivados: se debería tomar poca. El jamón de cerdo ibérico, lleva mucha grasa pero es excelente. El carbón del asado o la carne a la plancha es muy perjudicial para los intestinos (cáncer de colon). No hay un mensaje claro o sincero: la peor carne, es cerdo blanco y ternera junto con el cordero. Y lo mejor, pollo y pavo. Los animales de caza son buenos para el colesterol.

Por agenda, me vi obligada a salir antes de finalizar la conferencia. Aquí faltaría hablar de intolerancia en el caso de los huevos, así como del pescado.

El Aula de la Salud Integral de las Mujeres es un programa desarrollado por la Fundación Municipal de la Mujer que desde el año 2002 ofrece un foro donde las mujeres de Cádiz se forman e informan sobre el amplio espectro de aspectos sanitarios que son y serán determinantes en su desarrollo vital.