Hay muchas maneras de hacer este plato. Y fui preguntando a varias cocineras de reconocido prestigio nacional e internacional (mi hermana, mi peluquera…etc.) hasta que escogí la manera más sencilla de hacer la musaka, y que consideré que debía tener mejor sabor. Ésta es mi receta.
 

 

Ingredientes (para 3-4 personas): ½ kg de carne picada de ternera que sea jugosa, (yo compro un trozo llamado “doncella”), 2 berenjenas grandes, ½ litro de tomate frito casero a ser posible, dos o tres ajitos, aceite, bechamel de cobertura (harina, leche, mantequilla…) algo de orégano, queso parmesano y sal.

NOTA: para la bechamel, utilicé leche semidesnatada. Y lo cierto es que el plato quedó rico y ligero.

Lo primero fue hacer la bechamel –de cobertura- con la Thermomix: 600 g de leche, 60 g de harina, 30 de mantequilla, 1 cucharada de aceite, nuez moscada, pimienta y sal. Puse todos los ingredientes en el vaso, mezclé 10 segundos, velocidad 5. Y luego programé 7 minutos, temperatura 100º, velocidad 3. La bechamel ya hecha la pasé a un pequeño bol reservada.

A continuación, pelé y corté a cuadritos las berenjenas y los ajitos. En un perol grande, con un fondo de aceite, puse a saltear ambas cosas hasta que las berenjenas estuvieron pochadas. A continuación, puse el tomate frito y seguí refriendo y mezclando y luego con la carne picada, con sal y algo de pimienta blanca molida. Por último, cuando todo estuvo bien mezclado, le añadí el orégano y lo pasé a la rustidera, mientras iba calentando el horno.
En la fuente, coloqué la mezcla, puse encima la bechamel bien extendida y el queso parmesano. Introduje la fuente en el horno, unos cuarenta minutos, a 200º.
Esta musaka es un plato de vísperas, que son los que interesan.