Hace más de cuatro años le hicimos una entrevista a un ejemplar vip made in Venta Pinto, en el término de Vejer (Cádiz). Fue al reconocido bocata de lomo metío en manteca, una joya del desayuno tradicional de la zona, que sigue seduciendo a los clientes a pesar de su antiguedad. Ahora toca hablar de sus colegas, los bocadillos urbanos, los que nos acompañan cuando vamos de compras o nos quedamos a comer en el trabajo; siempre que cumplan la condición de contar con dos mitades de pan (de 100 g en total) rellenos de cualquier cosa buena –nunca precocinados-. La información procede del libro “Cocina Sana con la Dieta Mediterránea” de Teresa Benaches y Juan Carlos Galbis.
Es decir, que un bocadillo puede formar parte perfectamente de una dieta sana en un momento dado, siempre que su consumo sea esporádico, y siempre que se sigan algunas pautas complementarias de nutrición. Y es que hay veces que por no tener tiempo tenemos que recurrir al bocadillo en el almuerzo:
Hablamos de bocadillos con
Dos lonchas de mortadela con tomate.
De tortilla francesa de un huevo y unas rodajas de tomate natural.
De revuelto de espárragos.
De dos lonchas de jamón cocido y lechuga.
De jamón serrano y tomate natural, con unas gotitas de aceite de oliva.
Caliente, con dos rebanaditas de queso y unas gotitas de aceite de oliva.
De atún, o de sardinas en aceite.
¿Qué os parece? Todas estas propuestas son sanas y riquísimas. Pero, para la cena, si ya hemos comido bocadillo para almorzar, conviene que introduzcamos una ensalada o unas verduras a la plancha o incluso una macedonia de frutas. Por ejemplo:
Ensalada de cogollos con queso y vinagreta de anchoas.
Ensalada de patata con atún.
Huevos rellenos de espárragos trigueros.
Lechuga con puré de tomate
Ensalada de judías verdes con zanahoria y espárragos
Ensalada de frutas.
Pepinos rellenos de bonito en escabeche.
Ensalada de pepino
Ensalada de kiwis, langostino o gambas
Ensalada de maíz.
Ensalada de alcachofas y espárragos
Ensalada de verduras al horno
Ensalada de queso fresco
Judías verdes con almendras
Espinacas revueltas con ajos
Melón relleno de frutas del bosque ó
Sopa de fresones con kiwi y plátanos.
Es decir, que el menú de bocadillos deberá ser lo más variado posible, para evitar el aburrimiento y la carencia de vitaminas o minerales, y al igual que la comida hecha en casa deberá llevar verduras y frutas frescas, con un poco de carne o de pescado.
Los bocadillos pueden tomarse, según indica este libro, en una ocasión especial, como excepción. Pero si nos vemos obligados a consumirlos, debemos evitar mayonesas, mostazas, kétchup, mantequilla, etc.
Un bocadillo de pan, con unas gotas de aceite de oliva virgen extra, tomate natural y unas lonchas de jamón, atún, sardinas…etc., es una excepcional comida, tanto para almorzar como para la cena, consumido de modo esporádico.
Por supuesto, estamos hablando de bocadillos con ingredientes frescos y de calidad, casi siempre hechos en casa, y nunca de esos bocatas prefabricados con productos industriales, salsas superadictivas y lonchas de queso de plástico. Nada como un bocadillo casero o elaborado por un establecimiento de confianza.
El bocadillo es un tentempié que lleva muchísimos años haciéndonos disfrutar a todos. Pero hay que cuidarlo. No se puede comprar un bocadillo en cualquier sitio.
Y nada como un buen bocadillo de jamón ibérico de bellota…o mejor, de tortilla de patatas, mi favorito.