Entramos en el otoño y los tomates empiezan a flaquear, y eso que tengo una frutería que los trae de Murcia a una calidad bastante aceptable, yo diría que muy buena. Por ello, es el momento de combinar tomates con otras hortalizas como remolacha, junto a verduras, su aliño, y el toque de los rabanitos, que siempre aportan frescura y pique. Como gustó mucho en casa, pues aquí va la receta.
Ingredientes: 1 kg de tomates maduros, 500 g de remolachas cocidas (o frescas, mejor), 1 cebolleta, 1 diente de ajo, 1 pimiento verde, ½ pepino, 300 g de rabanitos, sal gorda, vinagre de Jerez y aceite de oliva virgen extra. Opcionalmente, se puede acompañar de unos daditos de queso fresco.
Si la remolacha es fresca, hay que limpiarla y pelarla, poniéndola a cocer durante unos veinte minutos con agua y sal. Dejar que se enfríen en la misma agua y luego pelarlas. En esta ocasión, encontré una remolacha cocida de muy buena calidad.
Lavar y picar los tomates, picar la remolacha, la cebolleta, el ajo, el pimiento, el pepino y los rabanitos. A estos últimos podemos dejarles la piel si nos gusta el toque de picante, es cuestión de preferencias.
Se mezcla todo en el robot con la sal, el vinagre y el aceite. Batir bien, igual que en el gazpacho convencional.
Pasar la mezcla por el chino. Al servir, adornar con el queso fresco.
Sale un gazpacho muy rico.
Qué rico tiene que estar, me encantan las cremas, gazpachos, sopitas…